La Fiscalía encabezó hoy la jornada de alegatos vinculando la totalidad de la prueba producida, destacando que la misma “habla por sí sola” y que da cuenta que los hechos sucedieron tal como se detallaron. 

El acusado se desempeñaba como operador de la Secretaría de Niñez, Adolescencia y Familia y estaba a cargo del dispositivo en el que se alojaban la víctima, en situación de vulnerabilidad. “Probamos que trabajaba allí, que tenía una relación de poder respecto de la víctima y que él convirtió ese lugar seguro en donde el Estado decidió que ella viviera, en uno inseguro”.

La fiscal demostró que cada una de las declaraciones de la víctima se fueron certificando con el resto de los testimonios que “dieron cuenta de que estos hechos sucedieron así”. “Todos los testimonios dan cuenta de la reiterancia del relato de la joven y la coincidencia en cada una de esas oportunidades”, enfatizó.

En cuanto a las pericias realizadas, la acusación repasó los testimonios de las peritos forenses, mencionó que quedaron en la víctima secuelas psicológicas luego de los hechos y que padeció stress post trauma – en el que incluso coincide la perito de la defensa- vinculado con este hecho y no con otros.

Contraponiéndose a la teoría del caso de la defensa, la Fiscalía descartó alguna motivación especial para efectuar la denuncia. Retomaron el testimonio de la psicóloga forense que destacó que para la adolescente “fue pura pérdida el proceso”. “Debe descartarse una motivación distinta a decir la verdad”, remarcaron.

El abogado defensor del imputado, en cambio, expresó en su alegato que los hechos no se habían probado más allá de toda duda razonable y pidió que se absuelva al imputado. Luego de ello el Tribunal interviniente se retiró a deliberar y la lectura del veredicto se realizará el miércoles próximo a las 8:30 horas.